El recuerdo de sí
En el 4° Camino, el recuerdo de sí es una práctica esencial para acceder al conocimiento de si mismo: se podría llamar igualmente la división de la atención.  Siendo atento a todo lo que nos transmiten nuestros sentidos, estamos conscientes al mismo tiempo del mundo exterior y del efecto que produce en nosotros (nuestras sensaciones físicas, nuestros pensamientos, nuestras emociones…). Esta apertura a lo que “es”, nos libera de la identificación y de la fragmentación, dejamos de tomarnos por las cosas que vivimos no siendo nada mas que un simple testigo, el observador imparcial. Así, recordamos nuestro ser, despertamos nuestra esencia.